IMPORTANCIA DEL USO DE UN BUEN CALZADO

El uso de un buen calzado es
fundamental para mantener una pisada adecuada y estable que distribuya uniformemente el peso del cuerpo, reduciendo la presión en ciertas áreas. Un calzado de calidad puede ayudar a prevenir lesiones al proporcionar el soporte adecuado y la amortiguación necesaria para los pies, especialmente en deportistas que requieren una estabilidad y soporte extra para sus actividades.
Un calzado inadecuado puede tener diversas consecuencias en nuestro cuerpo, generando dolores musculares y de espalda. Al no proporcionar el soporte necesario, el calzado puede desalinear la postura y aumentar la tensión en ciertos músculos, ocasionando molestias y dolores
. Lesiones como la fascitis plantar, esguinces, hernias discales y problemas lumbares pueden generarse o empeorar debido al uso de un calzado inadecuado.
Algunos consejos para elegir el calzado correcto incluyen:
- Tipo de arco : conocer la anatomía de los pies es fundamental para elegir el calzado correcto. Es importante determinar si se tiene un arco alto, normal o bajo, ya que cada tipo requiere un soporte específico para mantener una pisada saludable.
- Ajuste y comodidad : probar el calzado antes de comprarlo es esencial para asegurar que sea cómodo desde el primer momento. Es importante que cuente con el espacio suficiente para mover los dedos y se ajuste correctamente al pie.
- Actividad : se debe considerar el tipo de actividad que se realizará con el calzado, ya que cada actividad puede requerir diferentes niveles de comodidad y amortiguación. Para deportes específicos o actividades que impliquen riesgos, como el senderismo o el trabajo en entornos peligrosos, es importante elegir un calzado diseñado para brindar protección especial.
- Amortiguación y soporte : un calzado con buena amortiguación es importante para absorber el impacto al caminar o correr, protegiendo así las articulaciones y la columna. Además, un calzado con un buen soporte ayuda a prevenir lesiones y mantener una pisada estable.
- Material : el material del calzado es otro factor esencial a tener en cuenta. Se debe optar por materiales que permitan el movimiento natural del pie y que sean transpirables para evitar la acumulación de humedad.
- Suela : es importante elegir calzados con una suela con buen agarre que se adapte a diferentes superficies. En actividades específicas, como el trekking o la escalada, es crucial seleccionar suelas especiales que sean antideslizantes y se adapten a terrenos irregulares.
- Juanetes (hallux valgus) : la presión constante y la falta de espacio adecuado puede llevar a la formación de juanetes.
- Uñas encarnadas : un calzado demasiado ajustado o de forma incorrecta puede causar que las uñas crezcan de manera incorrecta, provocando dolor e infecciones.
- Lesiones musculares : un calzado inadecuado puede ocasionar tensiones y lesiones en los músculos de los pies y piernas, causando dolor y problemas como la tendinitis. Entre las lesiones musculares más comunes por calzado se encuentran la fascitis plantar, síndrome de la cintilla iliotibial, tendinopatía de Aquiles, entre otras.
- Problemas articulares : un zapato sin el soporte adecuado para las articulaciones puede aumentar el riesgo de desarrollar lesiones como la osteoartritis, especialmente en rodillas y cadera.
- Alteraciones posturales : el uso de calzado incorrecto puede afectar negativamente la postura, provocando desalineaciones en la columna vertebral y contribuyendo a dolores de espalda y cuello.









